En cualquier relación el deseo sexual es vital, pues aumenta la pasión y fortalece las relaciones, sin embargo, en las mujeres este cambia a través de los años y tiene relación con cambios hormonales o simplemente sensaciones o situaciones por las que esté pasando. Es decir, si una mujer está triste o bastante contenta, preocupada, o tiene algo pendiente por hacer, como un cambio de vivienda, un grado, o está en embarazo, pasando por la menopausia o alguna enfermedad, puede alterar el deseo sexual. Lo mismo pasa si está consumiendo algunos medicamentos, por ejemplo, los antidepresivos.
Debes tener en cuenta que si la falta de interés no tiene que ver con ninguno de los motivos anteriores y aun así persiste, puedes tener una alteración que se llama trastorno de interés sexual y en ese caso lo más recomendable es que lo consultes con un especialista.
¿Qué es la falta de apetito sexual?
La falta de apetito sexual tiene que ver con la falta de deseo. Es decir, cuando no se sientes ganas de tener sexo, sino que al contrario pensar en tenerlo puede causar pereza, en resumen, la falta de apetito sexual es cuando no quieres estar con tu pareja o simplemente no te interesa saber de nada que tenga que ver con sexo, ya sea porque siempre te sientes cansada o porque prefieres hacer otras cosas.
Síntomas
Cuando una mujer está perdiendo la libido o el deseo sexual hay ciertos síntomas que se presentan. Estos son los más frecuentes:
- No tener interés en ningún tipo de actividad sexual, incluida la masturbación: Si tal como ya lo mencionamos, siempre estás cansada, si no te llama la atención probar nada que tenga que ver con el área sexual y tampoco quieres estar con tu pareja, esto refleja falta de interés y por ende disminución del deseo sexual.
- Nunca o casi nunca tener fantasías o pensamientos sexuales: Es normal y sano fantasear con alguien o con algo a nivel sexual, pero cuando ese pensamiento es nulo, es una muestra de que falta deseo, o que la libido está baja.
- Preocuparse por la falta de actividad sexual o de fantasías: Cuando ya sientes que el deseo ha bajado sin causa aparente y te comienzas a preocupar, es otro de los síntomas.
Causas de la baja líbido
Recuerda que estos síntomas pueden ser causados por varios aspectos tanto físicos, hormonales o psicológicos, estos pueden ser algunos de ellos:
Causas físicas
- Problemas sexuales: Si sientes dolor en tus relaciones sexuales o ves que tus orgasmos han disminuido, esto puedo originar falta de apetito sexual.
- Enfermedades: Cuando sufres alguna enfermedad que, aunque no tenga que ver con algo sexual, te impide tener buena movilidad, o te genera cansancio, es el caso de la artritis, la artrosis, el cáncer, diabetes, tensión alta o enfermedades neurológicas o coronarias.
- Medicamentos: Si estás consumiendo medicamentos como antidepresivos, o alguno que sea inhibidor de la serotonina, estos pueden disminuir tu deseo sexual.
- Estilo de vida: Si tienes un estilo de vida poco saludable, bebes mucho, fumas, trasnochas o no te alimentas bien, puedes disminuir tu libido y por ende tu deseo sexual.
- Cirugía: Es normal que tu deseo sexual baje si tienes alguna molestia o cirugía reciente, así que dale tiempo a que sane para que regreses al ruedo.
- Fatiga: Si te sientes fatigado o cansado por tu trabajo, por cuidar a niños, personas mayores o personas con movilidad reducida, estar fatigado por problemas o enfermedades, también ocasiona que el deseo sexual disminuya.
Causas hormonales
Si hablamos de cambios hormonales que afectan la libido, estos pueden ser algunos:
- Menopausia: Cuando los niveles de estrógeno están bajos (lo que ocurre normalmente durante la menopausia o cuando esta se está acercando) puede pasar que tengas menos interés en el sexo. Eso es normal debido a que los tejidos vaginales tienden a secarse ya que las relaciones pueden ser dolorosas. Esto no quiere decir que durante la menopausia se acaben las relaciones (muchas mujeres siguen teniendo relaciones sexuales durante la menopausia sin ningún inconveniente) sino que en algunas mujeres estas se ven afectadas.
- El embarazo y la lactancia. En esta etapa los cambios hormonales están a flor de piel, así que es normal que disminuya el deseo sexual, el estrés de esas nuevas etapas origina que la libido baje en muchas ocasiones.
Causas psicológicas
Otra de las causas por las que disminuye el deseo sexual son las psicológicas. Entre ellas se encuentran:
- Los problemas de salud mental: Si sufres de depresión, ansiedad, pánico o similares, es posible que tu deseo sexual disminuya.
- Estrés, como estrés financiero o laboral cuando tienes este tipo de problemas tu mente está ocupada en otra cosa, lo que te impide disfrutar de una relación verdaderamente placentera, es posible que no tengas ganas de tener ningún tipo de contacto sexual.
- Baja autoestima de la imagen corporal: Si no te sientes a gusto con tu cuerpo, has engordado, adelgazado o por alguna razón has tenido un cambio significativo con el que no te sientes a gusto, puede ser que no tengas ganas ni de quitarte la ropa y tu deseo se estanque.
- Baja autoestima: Otra razón por la que puede bajar la libido es por la baja autoestima. Cuando sientes que no eres suficiente o cuando no te ves bien.
- Antecedentes de maltrato físico o abuso sexual: En este caso para ti tener una relación sexual será como recordar un mal momento, así que es normal que no quieras ese tipo de contacto.
- Experiencias sexuales negativas en el pasado: Si no has tenido relaciones sexuales sanas y placenteras, es posible que no quieras repetir y que despertar el deseo sea complicado.
¿Problemas en la pareja?
Muchas mujeres sienten que la cercanía y conexión emocional es el primer paso a la relación sexual, por eso si no estás bien con tu pareja y a partir de allí sientes que el deseo no es el mismo, el problema puede ser una de las causas.
Recuerda que la disminución del deseo sexual es el resultado de problemas persistentes en la pareja, tales como una comunicación deficiente, peleas sin resolver, problemas de confianza, celos, sentimiento de invalidez emocional, entre otras.
Causas más habituales
Para que el tema te quede lo más claro posible, te hacemos un recuento de las causas más habituales del por qué disminuye el deseo sexual en una mujer:
- Cambios hormonales: los cambios hormonales, como los que ocurren durante la menstruación, el embarazo o la menopausia, pueden afectar el deseo sexual.
- Estrés y ansiedad: el estrés y la ansiedad pueden disminuir el deseo sexual en las mujeres. Preocupaciones como el trabajo, las finanzas o las relaciones personales pueden afectar la libido.
- Fatiga: la fatiga física o emocional puede disminuir el deseo sexual.
- Problemas de salud: la depresión, la diabetes, la hipertensión y los trastornos de la tiroides pueden afectar el deseo sexual en las mujeres.
- Problemas de relación: problemas de comunicación, conflictos o insatisfacción en la relación, así como maltrato y abusos, pueden influir en tu libido.
- Medicamentos: tal como lo mencionamos, medicamentos como los antidepresivos, pueden afectar tu deseo sexual.
- Historial sexual: experiencias traumáticas o dolorosas relacionadas con el sexo pueden disminuir el deseo sexual o hacer que la experiencia no sea para nada placentera.
Tratamientos
La mayoría de las mujeres pueden acceder a tratamientos para normalizar su deseo sexual, algunos están enfocados a las terapias de pareja, medicamentos o incluso terapias hormonales, lo importante es que no te automediques, sino que consultes con el especialista cuál es el mejor tratamiento para ti.
Conclusión
El deseo sexual en una mujer puede mejorar mejorando el estilo de vida, las técnicas sexuales, o con la orientación correspondiente. No importa si estás en la menopausia, podrás disfrutar igual si sabes qué origina este problema y a partir de allí buscas cómo tratarlo.
